¿Para qué tanto misterio y sospechosismo? Ya al interior del PRI está decidido, decretado, consensuado y negociado el arribo del joven Paul Ospital a la dirigencia estatal del tricolor. Como es sabido, el método de elección siempre ha sido el mismo, por absoluta “dedocracia”.

Dirigente a nivel nacional del Instituto Reyes Heroles, quien conducirá los nuevos destino del tricolor también ha mostrado su inclinación hacia la candidatura del PRI a la gubernatura, no es un secreto y lo ha comentado en corto y largo.
 
Está bien, tiene todo el derecho como cualquier militante a la máxima aspiración de un político en el estado, ser abanderado de su partido a la gubernatura. Otros han soñado con la candidatura a la Presidencia de la República, pero por canallines y rateros, además de corruptos, no han llegado y todo se ha quedado en una mediocre campaña a la presidencia. Y me refiero al “Cerillo” que está en la UNAM dando clases, que seguramente no serán de moral o ética.

Y bueno, todo está previsto que para este lunes salga o se emita la convocatoria para la renovación de la dirigencia estatal del tricolor y que para el viernes 24, Paul Ospital sea ungido como el nuevo líder. Su más cercano competidor, Alonso Landeros, aceptó la “recomendación” del CEN del PRI y se alineó igual que todos los demás que se habían interesado en ser candidatos a la dirigencia; hasta la diputada Karina Careaga tuvo la intención, pero pronto se dio cuenta de que no había condiciones y que la tan llamada “democracia interna” está muy pero lejos, a años luz, de llegar al PRI.

Y no nos debe sorprender, siempre ha sido así; el famoso dedazo no ha sufrido menoscabo, no ha desaparecido y no se irá. Así es en todos (todos) los partidos políticos que se precien de ser serios. Ya ven, en Morena el desorden mayúsculo que hay y eso que tienen jefe político a ojos vistos; no es ninguna novedad, los cargos, las dirigencias y las candidaturas siempre se han vendido al mejor postor, al amigo o a quien pague más.

Lo que es cierto es que “haiga sido como haiga sido”, el PRI logra, con aparente calma, el relevo de su dirigencia estatal, una vez más se impuso la institucionalidad que, por lo visto, no ha llegado a Morena y las tribus al interior de este partido siguen jalando cada quien para sus muy particulares intereses, y de no apurarse, les va a ganar el 2021 con toda la carga electoral que trae ese año.

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Mario Ramírez Retolaza, el secretario del Trabajo que en poco tiempo ha demostrado que sabe cómo meterle al migajón al bolillo; conoce a la perfección todo lo que tiene que ver con su dependencia y con todos los aspectos laborales y las relaciones obrero-patronales que en varios estados de la República han sido motivo de conflicto o enfrentamientos entre la dependencia y los sindicatos.

Una muestra de ello fue en días pasados un evento de primerísima importancia que Ramírez Retolaza trajo a Querétaro; nada más y nada menos que la reunión nacional de secretarios del Trabajo y que mostró los avances que se tienen en materia de la reforma laboral y todos los pormenores que vienen con los cambios como el de las juntas de Conciliación que ahora pasan a manos del Poder Judicial.

Un evento de gran calado que también permitió venir a la secretaria del Trabajo a nivel nacional, Luisa María Alcalde, quien no había salido de la CdMx desde que inició el sexenio.

Las buenas cuentas que en materia del trabajo se tienen en la actualidad abona para que todos tengamos orgullo del Querétaro en que vivimos, donde desde hace más de 30 años no se tiene ningún conflicto laboral o huelga, independientemente de las de la UAQ, que es harina de otro costal.

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Todo un debate se ha tornado la opinión de que si en Querétaro hay integrantes del crimen organizado relacionados con el tráfico de drogas y con la violencia que, al parecer, cada día se acrecienta.
 
Negarlo sería pretender ingenuamente tapar el sol con un dedo; claro que hay y no se necesita ser perito en la materia. Pero en esta cuestión los hechos hablan por sí mismos.

Queda muy en claro que la función de la autoridad es evitar a toda costa que cunda el pánico o que se reconozca la intromisión del crimen organizado en la sociedad; ello aleja las inversiones y va contra la tradición que tiene esta entidad a nivel nacional.

Pero hay evidencias, y muy marcadas, de que efectivamente aquí viven, aquí están y que aquí tienen a sus familias; es un SECRETO A VOCES. ¿Quién no recuerda cuando a nivel nacional destaparon al señor Amado Carrillo con sendas residencias en varios puntos de la ciudad? ¿Que el famoso “Azul”, el señor Esparragoza, tiene a sus hijos en el Tec de Monterrey? ¿Que los Beltrán Leyva tienen relación con los más prominentes hombres de negocios de Querétaro? ¿Que los Gallos Blancos han servido para lavar dinero? Y así, uno a uno, los hechos nos demuestran que evidentemente hay delincuencia organizada; negarlo, lo reiteramos, es como pretender tapar el sol con un dedo y ello es imposible ahora en los tiempos de la Internet. Mejor que se reconozca y se combata.

¿Por qué pretender soslayar una realidad que cada vez es más patente? Para nadie pasan inadvertidas las ejecuciones que casi a diario se dan en la periferia y en la ciudad de Querétaro?

La delincuencia organizada está aquí, la realidad no se puede tapar con un dedo. Y si hay otros datos, que se den a conocer.

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