Derivado de la libertad absolutoria que otorgara un juez de distrito a Jesús Héctor Palma (el “Güero” Palma), delincuente que lleva compurgados muchos años, el ocurrente de AMLO de inmediato propuso una de tantas ocurrencias inconstitucionales: “que se acaben los sabadazos”. Ello a razón del auto de libertad que fuera otorgado el sábado pasado.

Ignora Andrés Manuel López Obrador, el ocurrente, que hay plazos establecidos en la Constitución en materia penal, artículos 20 y más, considerados parte de los derechos de los procesados. Los responsables de los reclusorios están obligados a cumplir las órdenes judiciales de otorgar la libertad en cuanto reciben la orden del juez competente, sea del fuero federal o local. No debe haber dilación.

No es cualquier orden que deba cumplirse al contentillo de la autoridad administrativa, como le parece al señor presidente de la República. Los carceleros incurren en responsabilidad si no cumplen la orden del juez; los centros de reinserción social o cárceles son simples reclusorios, los procesados están a disposición de la autoridad judicial. De tal manera que, si la orden judicial se expide en sábado, domingo o día festivo, el responsable del reclusorio debe cumplir la orden y dejar en libertad al procesado, sea por haber depositado fianza, por orden de libertad por falta de elementos para procesar o ser absuelto.

López Obrador está en la creencia que los fines de semana no se trabaja en el Poder Judicial, que la autoridad judicial anda en campaña igual que él, no es así. Craso error del presidente, sus ocurrencias no tienen límite. Los juzgadores también laboran días festivos y fines de semana, sobre todo si de la libertad del detenido se trata. El ministerio público lo sabe, así que el fiscal general, Alejandro Gertz Manero, por ser ministerio público en la causa penal, debió de estar enterado de la situación del “Güero” Palma.

Ante la torpeza de la Fiscalía, se dieron a la inmediata tarea de ingeniárselas para cumplir la orden de Andrés López y evitar que saliera del reclusorio el absuelto por la autoridad judicial federal. Tuvieron que inventarse el “arraigo” mientras verifican si hay otros delitos en contra del “Güero Palma”, para evitar que obtenga su libertad. En los EU, el absuelto por el delito de delincuencia organizada había cumplido su condena y fue regresado a México.

Total, el presidente no entiende y en todo se entromete, a pesar de su enorme ignorancia. ¡Gobernante totalitarista! Ahora que si el juez procedió a absolver al procesado, seguramente encontró errores en las pruebas de la acusación, incluso, tal vez violaciones al debido proceso, como sucediera en el caso de la francesa Florencia Cassez, caso que defendiera en su momento el mismo López Obrador. La libertad obedeció a errores de la Fiscalía General de la República.

López metido en todo. Sigue sin respetar la veda electoral. Ahora criticó al candidato del PRI al gobierno en el Estado de Nuevo León, por ofrecer tarjetas de apoyo a mujeres si gana las elecciones. Por ello sugirió a la fiscalía que tome cartas en el asunto. ¿Acaso no fue esa su política en campaña? ¡Ahora regala dinero disfrazado de apoyo social!

Otro dato. El mismo presidente ofreció reducir la edad de 68 a 65 años (edad que él aumentó) para dar apoyo económico a los adultos mayores; pero el apoyo económico será después de las elecciones. Lo cual encierra un claro significado de soborno electoral: traficar con promesas electorales fraudulentas. Conlleva la trampa, ilusionar al sector electoral de esas edades, incitándolos a votar por sus candidatos. Incluso amenaza, al manifestar que si pierde la mayoría en la Cámara de Diputados vetará las propuestas de la oposición, esta quiere eliminar los apoyos para seguir robando. Campaña electorera por medio de mensajes desde la presidencia de la República.

Andrés Manuel López Obrador en plena campaña. ¡Ah, pero que no lo haga la oposición, entonces existe delito! Vaya tergiversación de los hechos y manipulación de la verdad, información mentirosa, mientras tanto sigue violando la Constitución. Para colmo, su partido Morena también promueve que, de ganar la oposición, ellos eliminarán los programas de regalo de dinero que otorga el gobierno de López Obrador. Advierten, intimidan, amenazan al sector cautivo con retirar las dádivas económicas (políticas), que no sociales. Juego sucio y perverso de AMLO y su partido Morena.

Luego se muestra magnánimo y ordena a Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, que suspenda la persecución política en lo que resta de las campañas, para que no influya en las mismas. Pero antes pasó a perjudicar al gobernador de Tamaulipas. Acusa sin fundamento a todo aquel que se cruza en su camino. Esta vez, seguramente derivado de las culpas atribuidas a los funcionarios de la 4T, responsables del incidente de la Línea Dorada del Metro, que ocasionó la muerte de 24 personas y cerca de 80 lesionados.

Por eso pide paz, aunque solapada con actos perversos soterrados. ¿Quiénes pagarán por la negligencia en que incurrieron los funcionarios de la 4T? ¡Ellos son los responsables! ¿Irá alguien a parar la cárcel en fin de semana por los delitos de culpa cometidos?

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