Hablemos de consultores en comunicación, en estrategia electoral. De resultar cierto lo que se especula en torno al candidato del PAN a la gubernatura y de la candidata de Morena al mismo puesto, así como de la Alianza Sí por México, no queda duda de que los grandes electores en Querétaro son dos viejos conocidos: el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado y el mandatario queretano, Francisco Domínguez.

Con las reservas del caso, circula en el medio político electoral nacional que consultores que trabajaron en las presidenciables hace tres años ahora se han rolado con otras causas.

Hugo Scherer, antiguo publicista de Mario Delgado, se dice que ahora presta sus servicios para Mauricio Kuri en Querétaro. ¿Será cierto?

Y Roberto Trad, quien asesoró a Ricardo Anaya y hasta hace poco trabajó con Luis Donaldo Colosio Riojas, se ha sumado al esfuerzo de Sí por México.

De resultar cierto, el impacto en la Querétaro es mayúsculo, porque por muy profesionales que sean los consultores, solo son fieles a los dineros, y en el caso de Mauricio Kuri y Hugo Scherer, la mano de Mario Delgado está en la campaña del panista, y sobra decirlo que con el conocimiento del candidato panista.

Y hay más, es público que Mario Delgado y el gobernador Francisco Domínguez fueron buenos compañeros en la Cámara de Diputados federal. Luego entonces, hay civilidad política para llegar a acuerdos de ese tamaño: intercambiar asesores, consultores.

Ahora, en el caso de la candidata de Morena, “la tía” Celia Maya, su equipo promueve la especulación en torno a quien es el comunicador, el asesor o consultor en la materia.

Lo que se sabe es que de Mario Delgado no solo recibe el apoyo para sostener su candidatura, por órdenes de AMLO, sino que han dejado correr el rumor de que el equipo de comunicación ha sido impuesto por el dirigente nacional.

Respecto a Ricardo Anaya y su consultor Roberto Trad, es claro que no entra en Querétaro, pues el mandatario estatal, no de ahora sino desde hace tres años, se ha opuesto a las alianzas que promueve el otrora “joven maravilla”, quien es el que ha venido tejiendo esa monstruosidad llamada Alianza Sí por México.

Más claro nie el agua de Tlacote en sus meros tiempos.

Mario Delgado tiene metida no solo la mano, sino todo el hombro, todo el cuerpo, en la elección queretana; y por supuesto que el gobernador no se va a dejar e igual está en todo, pues es su estado, es su elección.

Y falta lo relacionado a la candidatura a la presidencia municipal de Querétaro por parte de Morena.

Lo que les espera a los y las morenas queretanas, a los y las panistas queretanas.

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