En Querétaro no existe eso del “primer panista del estado”, y menos si no es ni ha sido militante del PAN, ni en Querétaro ni en el país; eso es un término arcaico, de un discurso del pasado.

En el PAN estatal y nacional el horno no está para bollos, y aunque son públicas las diferencias que hay entre el grupo de Pancho Domínguez y el actual gobernador del estado con la dirigencia nacional que encabeza Marko Cortés y Ricardo Anaya, en la entidad prevalece la institucionalidad.

En días pasados, en el Comité Estatal del PAN, que preside Leonor Mejía, hubo dos reuniones con el gobernador Mauricio Kuri, con el primer panista del estado, según dijeron algunos que postearon la foto en redes sociales.

La primera fue para repartirse, compartirse o distribuir las diferentes carteras del blanquiazul a “todos los grupos”; es más, trascendió que se crearon puestos, secretarías de asuntos sin importancia, carteras que se llenan con nombres vacíos, como le quiera llamar, para satisfacer a todos, y sin embargo no fue así.

La segunda fue una reunión del mandatario con “todas las mujeres panistas”, en la que también trascendió que ni eran todas, y lo mismo que la anterior reunión, dejó mucha molestia en el panismo, principalmente en las militantes panistas que tienen años picando piedra.

En ninguna de las dos reuniones, dijeron algunos panistas de viejo y nuevo cuño, no son todos los que están ni están todos los que son, rememorando una muy antigua y conocida frase, para manifestar su inconformidad de manera muy subterránea.

En ese escenario, el senador panista y cabeza de uno de los principales grupos, o familias como él mismo definió, Alfredo Botello Montes, señaló que en el estado no existe ningún “primer panista”, y menos si no se es militante del PAN.

Claridoso, con el colmillo retorcido que le da el ser uno de los panistas con blasones, tanto al interior como al exterior, que ha ocupado casi todos los cargos, tanto públicos como de partido, solo le falta ser gobernador, o candidato a gobernador, desmiente que exista en la entidad y en el país el llamado “primer panista”.

Del país se entiende la postura de Botello Montes, no tienen en su poder la Presidencia de la República, y el dirigente nacional no tiene el tamaño para llamarse así, “el primer panista”.

Pero en el estado, hasta hace un año a Pancho Domínguez, cuando era gobernador, al interior del PAN le llamaban así, “el primer panista”, ahora eso ha cambiado de acuerdo a Botello Montes.

Claro que el líder de los llamados duros defiende su posición con argumentos, diciendo que el terminó es arcaico, obsoleto, de la tercera transformación; y sin meterse en polémica, se lava las manos señalando que en Querétaro se tiene un PAN fuerte y un gobierno fuerte, pero son cosas diferentes.

En este galimatías de definiciones, dogmático y pragmático al mismo tiempo, Alfredo Botello, con claridad ideológica, señala que una cosa es el partido y otra es el gobierno; asegura que en el PAN estatal “no hay grupos”, “no hay diferentes corrientes”, lo que hay son “familias” de panistas, que al final son los que integran el partido.

Aunque Alfredo Botello Montes defiende por un lado a la dirigente estatal, que tiene una actuación más pequeña que medianita, y al mismo tiempo pone los puntos sobre las íes y sin “querer queriendo” dice de Ricardo Anaya y su discurso de alianzas que no lo ha leído, pero que las alianzas deben ser de facto, porque por ejemplo en Querétaro, con Pancho Domínguez se ha ganado todo sin alianzas, pero que sí, de acuerdo con las circunstancias estas deberán de darse.

Mientras que la dirigente estatal panista, Leonor Mejía, se dedicó la semana pasada a pasearse en los medios de comunicación, en donde lo más trascendente que dijo, junto con su secretario general, fue que podría Acción Nacional expulsar a 30 panistas en Querétaro.

Sí, Leonor Mejía Barraza, presidenta del Comité Directivo Estatal del Partido Acción Nacional, señaló que son alrededor de 30 panistas que participaron en otras campañas políticas en la pasada contienda, por lo que se está analizando su expulsión del organismo político y que le impone INE multa al PAN por 14 millones de pesos, que ya se está pagando, producto de que se incumplieron situaciones administrativas, derivado de dos multas de parte de los procesos ordinarios de las campañas pasadas.

Mientras la dirigente se la pasa bien hablando de nada sustancioso, al grado de asegurar que los diputados locales están al servicio del gobernador, al referirse a la aprobación de la ley de aguas, el senador Botello Montes tiene que salir al quite para dejar en claro que en Querétaro, como en el país, no existe eso del “primer panista”.

Y abre la puerta, porque en el PAN desde hace unos años se cerró la afiliación de militantes, y en septiembre o noviembre se podría abrir el registro de afiliación, y entonces sí, tal vez el gobernador Mauricio Kuri se anime a solicitar su militancia blanquiazul.

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