Este jueves los legisladores aprobaron los dictámenes emitidos por la Entidad Superior de Fiscalización del Estado, de 17 municipios y de los Difs; curiosamente quedó pendiente el de Huimilpan, Municipio que perdió electoralmente el PAN en dos ocasiones.
No se hicieron esperar las declaraciones con tintes políticos de los diputados, según el “bando” en el que se encuentren; ahora con predominio panista tanto en la Legislatura como en la misma Entidad Superior de Fiscalización, quienes ponen a los priistas de espaldas contra la pared. Eric Salas intimida haciendo saber que procederán en contra de los corruptos.
Por su parte el coordinador de la bancada priista, Mauricio Ortiz, dice que en las cuentas públicas hay errores administrativos y no con dolo ni de mala fe. Ninguno de los dos legisladores tiene razón alguna para adelantar juicios superficiales, mucho menos de naturaleza política.
Veamos el por qué. En principio, las cuentas públicas regularmente siempre llevan observaciones que hacen los auditores de la ESFE, quienes no siempre tienen la razón, no son jueces. No es pues nada excepcional. Segundo, los entes con observaciones tienen el derecho de aclarar y/o corregir esas observaciones, ya sea con documentos o explicando con precisión que las observaciones no tienen razón de ser; para ello tienen un periodo que la ley les concede.
De tal manera que las observaciones pueden ser solventadas, lo que significa debidamente aclaradas. En caso contrario, será necesario abrir expedientes de responsabilidad, sea administrativa, resarcitoria o incluso de corte penal. Pero antes de esto no se pueden adelantar juicios de apreciación, solo son opiniones que enturbian el ambiente y buscan satanizar a las administraciones de la oposición. Incluso suelen ser moneda de cambio político: esta cuenta por aquella.
Pero, lo más curioso son las declaraciones del coordinador priista Mauricio Ortiz, quien afirma que son errores administrativos y no de mala fe ni realizadas con dolo ¿Cómo sabe el legislador? Lo que procede política y legalmente, es que, el ente observado sea el responsable de aclarar las observaciones; estos son los responsables de aportar pruebas, de aclarar dudas, de justificar adecuadamente para que sean aclaradas las observaciones antes de que se inicie algún procedimiento legal en contra de los omisos.
De tal suerte que los legisladores utilizan, como en años recientes, las cuentas públicas para saciar venganzas políticas, para exhibir al oponente para el desprestigio mediático; solo eso, dado que jurídicamente no hay nada para nadie, el trámite está en proceso.
Considero que a Eric Salas, no le asiste la razón hasta en tanto no culmine el proceso administrativo que dará inicio con la publicación de las cuentas públicas y las respectivas notificaciones a los presuntos incumplidos. Y por cuanto a Mauricio Ortiz, que no defienda a quienes no han tenido la oportunidad de saber de qué se les acusa; estos se defenderán con las aclaraciones, de lo contrario en los juicios respectivos. Y, en caso de desvío de fondos públicos, la ley no distingue si son de buena o mala fe para sancionar, con dolo o sin dolo. Se castiga el desvío.
La duda mata ¿Qué pasó con la cuenta pública del Municipio de Huimilpan, gobernado entonces por el PAN? ¿Le están ayudando a corregir la plana para evitar observaciones? Y es que ahora lo gobierna el PRI y sus aliados electorales. Fue una administración que tuvo cambio de presidenta municipal en dos ocasiones, eso no deben olvidarlo. Nada se dijo al respecto ¿Habrá intercambio de favores? O simplemente se trató de un olvido, total son cuentas públicas del segundo semestre del 2014.
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